Las prácticas de bioseguridad previenen la introducción o propagación de patógenos nocivos en una población ganadera o avícola sana. Para evitar estas posibilidades, las prácticas de bioseguridad deben convertirse en parte de una rutina. Ya sea ocasionalmente o a diario, realizar visitas a establecimientos aumenta el riesgo de propagar patógenos de un lugar a otro, particularmente cuando se visitan varias operaciones ganaderas o avícolas.
Los profesionales trabajan para proteger y apoyar la industria y las comunidades ganaderas. Entre ellos se incluyen profesionales de salud animal, educadores del Departamento de Extensión, socorristas, representantes de ventas agrícolas y cualquier otro profesional que trabaje con ganado o aves de corral.
Al visitar operaciones ganaderas o avícolas, practique técnicas de bioseguridad adecuadas para proteger al público. Esto demuestra comprensión de las enfermedades animales y su amenaza para la industria, así como respeto por la seguridad pública y el sustento personal. Como profesional, ya sea que entregue alimento, recolecte alimento o muestras, responda a una emergencia animal o simplemente visite a un cliente, es su obligación y responsabilidad predicar con el ejemplo.
Este recurso lo ayuda a usted, el profesional, a prepararse para realizar visitas seguras a instalaciones ganaderas y avícolas y participar en conversaciones sobre bioseguridad.